Reformamos integralmente estas antiguas oficinas para convertirlas en una vivienda con una superficie útil total de 60m2. Ubicada en un edificio de 1965, era prioritario renovar completamente las instalaciones y la excesiva compartimentación interior no válida para el nuevo uso.
Estamos ante un espacio donde era primordial contar con iluminación indirecta que conseguimos gracias a los foseados que tienen lugar en todas las estancias de la vivienda.
La forma cuadrada de su planta nos ayuda a dividir el espacio en un amplio salón con despacho, cocina con puertas correderas de cristal que ayudan a aligerar y comunicar, baño con acceso desde la zona común como desde el dormitorio en el cual tiene lugar un vestidor y zona de deporte.